Sala de Prensa

18/04/2007

Puerto Montt: Comenzó juicio Piccardo

Defensores de ambos acusados cuestionaron falta de imparcialidad en dos de los jueces del Tribunal Oral en lo Penal de Puerto Montt y sostuvieron en sus alegatos de apertura que los jóvenes concurrieron al domicilio del fallecido sacerdote a prestar servicios sexuales.

Puntualmente a las 9 horas de este lunes se inició el juicio por el delito de robo con homicidio del sacerdote Benedicto Piccardo Olivos, ex director del Liceo de Hombres de Puerto Montt, ocurrido el domingo 15 de enero del año 2006.

En este caso el Ministerio Público acusó a Alex Escalante de 25 años y al uruguayo Gonzalo Caetano de 22, de haber concurrido al domicilio del sacerdote a robar y a matar, por lo que arriesgan una pena que podría llegar al presidio perpetuo calificado.

Antes de iniciarse el juicio oral, los defensores de ambos acusados promovieron un incidente a fin de cuestionar la falta de imparcialidad de dos de los jueces del Tribunal Oral en lo Penal, luego de que el presidente de la sala apareciera en un medio de comunicación local refiriéndose a los hechos como un asesinato y dictara una resolución que sustituyó a un juez originalmente designado para conocer de este juicio por otra magistrada, sin que la resolución apareciera debidamente fundada, todo lo cual fue desestimado por los mismos jueces, quienes no se inhabilitaron ni designaron a otros jueces para resolver este cuestionamiento.

Durante esta primera audiencia de juicio oral, los magistrados Francisco del Campo, Ivonne Aveldaño y Patricia Miranda, recibieron los alegatos de apertura de ambas partes, además del testimonio de Caetano.

En sus alegatos de apertura, los defensores de los acusados; Germán Echeverría y Jorge Matzner, expusieron sus teorías de defensa que apuntan a que en los jóvenes nunca existió el ánimo de matar, sino que concurrieron al domicilio del fallecido sacerdote a prestar servicios de connotación sexual.

El defensor de Caetano señaló que "no hubo un dolo homicida de mi defendido. El pudo haber huido del país y no lo hizo y se entregó y colaboró con la acción de la justicia". Agregó que "las lesiones sufridas por el religioso fueron de carácter leve y no mortal y que Piccardo pudo haber muerto por enfermedades no conocidas por los imputados", pudiendo haberse desatado su deceso por lo que denominó "efecto cascada", detallando que la segunda autopsia indicó que su corazón era tres veces más grande que lo normal.

Posteriormente, Echeverría detalló sobre diversas pericias realizadas al cuerpo del religioso desde la autopsia, que señalan que Piccardo no murió por asfixia causada por su defendido, como se le imputó en la primera formalización, y señalando que la víctima tenía un compromiso locomotor, "rengueaba y usaba bastón".

Respecto de las circunstancias en las que se desataron los hechos, Echeverría compartió lo señalado por su colega y recalcó que el acceso de los acusados a la vivienda se produjo con plena voluntad de la víctima y con fines de prestar servicios sexuales. "Mi defendido ha sostenido desde el principio de esta investigación que la visita que realizaron al departamento tenía un propósito de un trato carnal remunerado".

Echeverría agregó que su defendido iba al departamento en busca de dinero y al producirse la evasión de Caetano al baño del inmueble se produjo una discusión, señalando que no hay indicios de que Escalante haya golpeado con un elemento contundente al religioso.

El abogado sostuvo también que en la segunda autopsia realizada al cuerpo de Piccardo, peritos tanatólogos concluyeron que había evidencia que vuelve verosímil la teoría de la defensa.

El defensor terminó su alegato de apertura pidiendo al tribunal calificar el mal causado de acuerdo a las reales circunstancias en que a su juicio concluyeron los hechos. "No pedimos impunidad, sabemos del aporte del padre Piccardo a la comunidad de Puerto Montt, pero nuestro deber es abogar por la justicia; nos asiste la convicción de que la responsabilidad de Alex Escalante en estos hechos es por robo con violencia".

Se espera que este juicio se extienda por más de una semana, tiempo en el cual se espera que declaren al menos 50 personas, entre peritos y testigos de ambas partes.

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